Hoy nos sumergimos entre pastas de azúcar decorativas. El fondant y su historia nos interesa mucho.
Todos los seguidores de la repostería creativa habrán oído hablar del fondant, pasta de goma, pastillaje, mazapán o chocolate plástico.
Se trata de pastas de modelado muy utilizadas para decorar tartas, realizar figuras modeladas o preciosas flores de azúcar.
En este post vamos a conocer un poco más acerca del fondant y su origen, pasta de azúcar por excelencia en la decoración de tartas.
El fondant, es una pasta compuesta fundamentalmente de azúcar y también de otros ingredientes como glucosa, grasa vegetal, glicerina o CMC.
Es similar a una plastilina elástica comestible.
Se emplea para recubrir especialmente tartas, bollos, pasteles, cupcakes, etc.
Parece ser que el fondant data del siglo XVI-XVII, dentro del período renacentista, época en la que su confección incluía almendras, siendo más parecido a una pasta de mazapán que al concepto de fondant como tal que tenemos hoy día.
La palabra fondant es de origen francés, que alude a su textura fundente en la boca,
El azúcar era caro por entonces y los maestros pasteleros agregaban este fruto seco para su elaboración.
Se dice también que la receta inicial contenía agua de rosas, azúcar, jugo de limón, clara de huevo y goma de tragacanto.
Las primeras versiones en que solía utilizarse era sumergiendo pequeños pasteles en fondant caliente y dejándolos reposar posteriormente.
Cabe aclarar que el fondant líquido y el fondant laminado son 2 productos diferentes.
Comienza su utilización en Reino Unido y de ahí se expande al resto de Europa y a América.
El mazapán era principalmente un alimento de celebración, considerado tanto un ingrediente como una deliciosa elaboración.
Como ingrediente, el mazapán se unió con el fondant para dar lugar a una pasta que podía moldearse y esculpirse.
El fondant ha sido reconocido como un glaseado o cobertura muy versátil gracias a su consistencia elástica.
Permite que se pueda amasar, estirar, enrollar, cortar y sellar, siendo una opción fantástica para realizar decoraciones.
A diferencia de otros frostings, el fondant puede almacenarse durante largos períodos de tiempo.
Actualmente, los reposteros suelen combinar la cobertura de fondant con otros glaseados como glasa real y una multitud de técnicas decorativas. Además se puede teñir, colorear, matizar con colorantes en polvo, estampar, estarcir, etc.
En definitiva, es uno de los reyes de la repostería creativa y permite sin duda llevar la imaginación a límites insospechados gracias a su manejabilidad y textura.
Si a vosotros os encanta realizar decoraciones con fondant o por el contrario sois reacios a este material comestible o bien os resulta complejo, contadnos! Nos encantará saber vuestro punto de vista.
Y si queréis echar un vistazo al curso de mazapán que hace nuestro profe Paolo, podéis verlo aquí